Un manifestante haciendo un gesto obsceno -y probablemente, más que habitual en él, es el único lenguaje que entiende-...
...a un policía antidisturbios alemán tras celebrarse una manifestación pacífica con motivo de la conmemoración del Primero de Mayo anoche en el barrio berlinés de Friedrichshain, en Alemania.
Me apuesto lo que sea a que este gallo humano no ha pegado nunca un palo al agua. ¡A ver si trabajamos, hombre!
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