
Cuando los médicos llegaron al lugar del accidente, lo encontraron literalmente partido en dos, pero tras una serie de operaciones en las que utilizaron piel de su propia cabeza para poder cerrar su torso consiguió sobrevivir, aunque más de dos años tuvieron que pasar para que la piel se fortaleciera lo suficiente como para poder contener los órganos dentro de su cuerpo.
A día de hoy, en lo que se puede considerar un milagro de la ciencia y la naturaleza, el hombre puede caminar con la ayuda de un corsé y piernas ortopédicas.
Desde el lamentable accidente ha estado bien cuidado, pero su mayor secreto es la alegría, nunca se deprime y salvo por la apariencia se puede decir que está mejor que la mayoría de los hombres de su edad. Es impresionante porque es la única persona en el mundo que sobrevive con tanta cantidad de cuerpo amputado.
Él, lejos de deprimirse, incluso ha sabido ver el provecho en su desgracia y a partir de su accidente tuvo una idea peculiar y atractiva para aplicar en su negocio: “El supermercado del Medio Hombre todo a mitad de precio” (“The Half – Man Half – Price Store”). Estas ansias de vivir, este sacarle el jugo a las cosas pequeñas que nos rodean es sacarle doble partido a la vida, ¿no? Este gran hombre es un claro ejemplo de ello.
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