El espinoso problema de Noorsyaidah

Noorsyaidah tiene 40 años y es profesora de una guarderia en Sangatta, en el este de Kutai, Indonesia. Sus primeros síntomas se manifestaron en el año 1991, cuando alambres de metal empezaron a crecer de su pecho y estómago. Durante la primera semana, los alambres se desprendían de su cuerpo con facilidad, pero un mes más tarde, los alambres crecieron de nuevo y, desde entonces, no se han caído sino que han continuado creciendo.

El alambre de metal tiene entre diez y veinte centímetros de longitud, lo que le produce gran dolor y dificultades para poder moverse. En un principio, los más escépticos creyeron que se autolesionaba o que pegaba esos alambres a su cuerpo para adquirir notoriedad. Pero parece que no. Los médicos ahora tratan de elaborar otras teorías, pero hasta la fecha no han podido dar ninguna explicación médica o científica al respecto.

La mujer ha pasado por infinidad de especialistas y hospitales. En el último de ellos, el 'Wahab Sjahranie Samarinda', un equipo de siete profesionales sanitarios de lo mejor en sus respectivos campos examinaron el estado de salud de Noorsyaidah. Le realizaron una serie de pruebas de orina, sangre y tomaron muestras de su piel, además de realizar varias radiografías que mostraron que había alambres preparados para crecer.

Los resultados del examen médico rebelaron que los alambres crecen justo desde debajo de la piel, de modo que no interfieren con ningún órgano vital. Aún así, la causa de su desarrollo es desconocida. "Nunca he visto algo similar", dice uno de sus doctores, “el cuerpo humano no produce alambre".

Obviamente, la mujer se ha convertido en todo un fenómeno viviente a la que quieren examinar médicos de todo el país y por la que se pelean diversos programas televisivos. Veremos a ver en qué acaba todo esto.