A Obama se la suda la pobreza de su hermano

La edición italiana de la revista 'Vanity Fair' ha publicado un reportaje sobre la vida del hermano menor del candidato demócrata a la presidencia de los Estados Unidos, Barack Obama en la que muestra en unas imágenes a George Hussein Onyango Obama, de 26 años, residiendo en una choza de dimensiones dos por tres metros en el destartalado suburbio de Huruma, a las afueras de Nairobi (capital keniana).

En su autobiografía, el aspirante presidencial yanqui lo menciona brevemente diciendo de él que lo recuerda como un "hermoso niño" pero lo cierto es que el "hermoso niño" sobrevive con menos de ¡un dólar (67 céntimos de euro) al mes!, muy por debajo de lo que se considera el umbral de la extrema pobreza. Como si esto no fuera suficinete, avergonzado por su miseria, no revela a nadie su identidad ni sus lazos familiares. "Vivo como si fuera un recluso, nadie sabe quién soy", dice. (Aunque la vergüenza debiera sentirla quizás otro, no él.)

Su choza está decorada con carteles de fútbol de los grandes equipos italianos de este deporte como el Inter y el Milán, así como un calendario que muestra exóticas playas del mundo y una portada de periódico en la que aparece el candidato demócrata. Si alguien menciona la coincidencia de su apellido, George niega que sean familiares, "me siento avergonzado", insiste. El joven Obama señala que tan sólo ha visto a su famoso hermano mayor dos veces, una cuando tenía cinco años y la última vez en el año 2006, cuando el senador por Illinois realizó una gira por África Oriental y visitó la ciudad. "Fue muy breve, hablamos tan sólo unos minutos. Era como una reunión con un desconocido", apunta.

George ha tenido una vida dura, pero espera poder encaminarla ahora ya que va a comenzar a estudiar un curso en una universidad técnica local. "He tenido que aprender a vivir y obtener por mí mismo lo que he necesitado", asegura.

Menos mal, porque el hermano rico ni está ni se le espera.