viernes, 27 de junio de 2008

Air India, otro estilo de volar

Un avión de la compañía 'Air India' se ha equivocado de destino porque a sus dos pilotos les dio por echarse una siestecita durante el vuelo cuando el aparato llevaba a bordo más de un centenar de pasajeros. (Ésta es la misma compañía que hace unos meses expulsó a cinco azafatas de su plantilla por estar demasiado gordas. "En la altamente competitiva industria de la aviación civil, la compañía tiene que fijarse en la personalidad de sus empleados", afirmaron durante un juicio -a demanda de dichas empleadas expulsadas- donde el tribunal dio la razón a la compañía animando a las chicas a "combatir sus michelines" si querían dedicarse a este mundillo.)
En el presente incidente, se ve que el aeroplano despegó de madrugada del aeropuerto de Dubai, aterrizando en la ciudad india de Jaipur hacia las siete de la mañana. Desde allí siguió ruta hacia Bombay. Sin embargo, tras haber efectuado un vuelo nocturno, el nivel de cansancio era máximo en los pilotos por lo que se sobaron después de despegar de Jaipur; eso sí, antes de ponerse el pijama, echar sus oraciones y buscar la posturita apropiada en el siempre complicado sillón de cabina apretaron el botón de piloto automático, que son unos profesionales.
Los controladores aéreos del aeropuerto de Bombay intentaron entrar en contacto con la tripulación para iniciar la maniobra de aterrizaje, pero este siguió vuelo tan ricamente y a gran altitud hacia la localidad costera de Goa, más hacia al sur. Al final, consiguieron poner en marcha una alarma de seguridad que despertó a los pilotos (a uno le jodió un sueño erótico que estaba teniendo en ese mismo momento con la mujer de su compañero), pero bueno, después de unos bostezos y unos estiramientos inmediatamente reaccionaron: se tomaron su desayuno rico en fibras, dieron media vuelta y se dijeron: "vamos pa casita".
India no registra accidentes aéreos desde hace varios años, lo que es un auténtico milagro pues esta misma semana a otro avión se le impidió despegar tras comprobar que sus pilotos estaban totalmente borrachos después de una juerga loca. Eso sí, las azafatas son auténticas modelos. La idea de la compañía es sencilla: pongamos por caso, si tienes 18 años y mides 152 centímetros, puedes pesar 52 kilos como máximo. Y lo cumplen a rajatabla. Más ahora con la justicia de su parte. Ya hace unos años, al abrir un proceso de selección para ampliar su plantilla, la compañía señaló que no tendría en cuenta las solicitudes de aspirantes con acné o con una mala dentadura. La compañía aduce para estas medidas motivos de seguridad y salud, pero también de personalidad porque, según sus alegatos, la condición física de una azafata es una parte muy importante de su personalidad.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Solo comentar que es normal que los pilotos pongan el piloto automatico y se echen a dormir.