Nacidos en el mes de marzo, estos dos siameses chinos esperan la operación de cirugía que los separará. Lamentablemente, además, tienen una patología congénita del corazón. Esperemos que todo salga bien. ¡Ánimo, muchachotes! Lo que Dios ha unido, que lo separe el hombre.
martes, 17 de julio de 2007
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Las 10 más vistas
- La novia despechada
- La dura vida de Lizzie Velásquez
- Un gusano acampado en el cerebro de una mujer
- Juliana, la niña sin cara
- La gonorrea es cada vez más resistente a los antibióticos en los Estados Unidos
- Huang Chuncai, ¡estamos contigo!
- Didier, el niño tortuga
- Elvis Presley murió a causa de no poder cagar
- Primera prótesis de la Historia
No hay comentarios:
Publicar un comentario