
Mendiga para poder sobrevivir desde que sus padres lo abandonaron en un hospital al enterarse de que su obesidad (pesa más de cien kilos) era incurable.
El hospital llamó a la policía que, incomprensiblemente para un país comunista y de izquierdas (se entiende el recochineo), lo dejó tirado en la calle y que él se las apañe.
Un túnel subterráneo hace las veces de hogar. Su peso restringe sus movimientos, lo que le obliga muchas veces a orinarse encima.
Zhoulei sólo conoce los nombres de sus padres y el pequeño no ha podido dar ningún dato más de valor sobre dónde viven estos.
Los servicios sociales de la ciudad buscan una solución para sacarlo de las calles pero ahí sigue... tirado, malviviendo...
1 comentario:
Yo lo hubiera utilizado como contrapeso en las grúas de las obras. Algo es algo.
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