El caso, que está levantando polémica en la sociedad china y hasta criticas a las nuevas generaciones de jóvenes del país, a los que se acusa de no ser suficientemente responsables para tener hijos, podría resolverse con una subasta donde el progenitor que esté dispuesto a pagar más dinero al otro se "librará" del niño.
Pese a sus extrañas circunstancias, el caso no es el primero de este tipo que se produce en China donde ya en el año 2000, una pareja de divorciados en Zhejiang (este del país) se negaba a asumir la custodia de la hija de ambos, de nueve años, y se recurrió también a una subasta, en la que el padre asumió los cuidados de la chica a cambio de 250.000 yuanes de la madre (aproximadamente 35mil dólares al cambio).